Me cuesta pensar en un programa más femenino que ir a tomar un cafecito.
El cafecito es la excusa para todo: un encuentro con amigas, una pausa en el trabajo, un pasatiempo de fin de semana, lo que sea. Siempre es buen momento para un café o un té.
Se trata de un ritual muy importante en la vida de todas nosotras. Es una forma económica y sencilla de gratificarnos.
¿Qué sería de nosotras sin esas simpáticas confiterías o casas de té desparramadas por todas las ciudades del mundo?
Recuerdo mi último viaje a la ciudad de Nueva York. Hacía un frío cruel que hacían imposible caminar por la calle.
Luego de recorrer varias cuadras en busca de un lugar para ponerme a resguardo, descubrí sobre Madison Avenue, un Nespresso que me vino como anillo al dedo.
Entré sin dudarlo y me senté a disfrutar de un cortado con un macaron de pistacho. El alma me volvió al cuerpo y pude continuar con mi ajetreada recorrida turística.
Pero los cafés no son sólo programa de invierno. Es muy agradable sentarse al aire libre a mirar la gente pasar entre sorbo y sorbo.
Buenos Aires es la ciudad perfecta para tomar un cafecito, aunque los cafés parisinos son difíciles de superar.
Aquí les dejo una lista de mis cafés preferidos. No dejen de darse una vuelta cuando tengan oportunidad.
1. Piano Nobile, Buenos Aires.
2. Cafe Cluny, New York.
3. Croque Madame en el Museo, Buenos Aires.
4. Chez Francis, París.
5. Café des arts en el Malba, Buenos Aires.
Si, esta es la época del cafeteo amistoso!!!
ResponderEliminarTe sumo La durée de Champs Elisées -París-, un placer visual y gastronómico...
Besos:>
Si!! Total! Es increíble!
ResponderEliminarCariños!