Hace unos días iba caminando por la calle y pasé por al lado de una pared blanca en la que podían leerse dos frases. Una de ellas iba dirigida a un ex presidente, la otra apuntaba a la actual presidente de la Nación.
La primera decía simplemente: “Pirulito: Ladrón”. La segunda, mucho más chocante, “Pirulita: yegua puta”. Sepa el lector disculpar que reproduzca estas palabras, pero resulta necesario para ilustrar mi punto de vista.
Este grafiti me hizo pensar en el tema de los insultos.
En todos los ámbitos, no sólo en la política, cuando se insulta a un hombre, se lo ataca por lo que efectivamente es criticado: ladrón, corrupto, degenerado, etc.
Ahora bien, cuando se quiere agraviar a una mujer, se recurre sistemáticamente a su sexualidad: puta, yegua, perra, etc.
Incluso cuando realmente se quiere herir a un hombre, se utilizan expresiones injuriantes para con la madre o hermana de éste. Sin embargo, nada suelde decirse de las elecciones sexuales del hombre (salvo cuando se usa la homosexualidad como insulto, que realmente no es tal).
Pareciera que para los hombres ser promiscuo no es malo, pero para nosotras sí lo es.
Perdonen que sea insistente pero, ¿no les parece misógino? ¿No es esta, acaso, otra forma más de reducir a la mujer a su vida sexual?
Yo no defiendo las políticas públicas de la Presidente. Es más, no las comparto. Sencillamente creo que si nos van a insultar, las mujeres merecemos al menos un poco más de creatividad.
Es obvio que a ningún hombre le puede gustar que le digan 'topu'. Es un palabra que apunta directamente a tu sexualidad. Que a algunos homosexuales no les molestara que les dijeran 'puto lindo' es otra cosa, pero sigue siendo una palabra despectiva que trae claramente 2 imágenes a la cabeza: sexo oral o anal entre dos hombres.
ResponderEliminarAhora bien, por lo general, y para reafirmar tu teoría, el insulto más tradicional entre los hombres, y que supera a 'topu' es HDP. Y es un insulto que molesta porque te insultan a tu madre.
Así que vaya que las mujeres las llevan mal en cuanto a insultos. Si ellas son p.... y ellos son hijos de p... , pareciera que no hay ningún problema sobre la tierra que esté relacionado con los hombres, todos los males del mundo son por culpa de las p.... mujeres.
Lo cual es una aberración total, te darás cuenta de la ironía de esa conclusión y que bueno que tras 20 siglos oscuros, la humanidad se ha terminado de dar cuenta que los sexos, las razas y/o las religiones no son el problema. El problema lo tienen los hombres (o mujeres) que no saben como lidiar con las diferencias.
Y que viva la diferencia !!!
Gracias por tu comentario Martín. Hay mucho de verdad.
EliminarSaludos!!
Cuando te dicen HDP, el insulto no va dirigido a la mujer, como quieres inferir en tu misándrico intencionado pensamiento, el HDP hiere la fibra más íntima de un hombre, lo más sagrado, lo más puro, lo más noble, a la consideración de un hombre, su madre. Insulta una de las cosa que más ama, donde más le duele, no a la condición de mujer. Que lo veas de esa forma, en tu indigencia intelectual, dice: que disfrazas tu creencia del igualismo, en la excusa del género, por el discurso manipulador de la pobre víctima oprimida. Pensar de esa forma, ofende el ideal, de una sociedad igualitaria y se parece mucho, a la sociedad que les conviene a las mujeres, cosa que es muy distinta.
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