domingo, 24 de octubre de 2010
Las tres letras
Perdone el lector si mis escritos suenan mucho a queja, pero estoy cansada de toparme cotidianamente, con detalles machistas.
La semana pasada, por ejemplo, me llegó la invitación al casamiento de mi prima.
Lo que me indignó fue que el sobre decía: “Juan Pérez y Sra.” (Aclaro que he alterado el verdadero nombre de mi cónyuge para no involucrarlo personalmente en el presente descargo).
Así es, conozco a mi prima desde que nací, ella me cuidó cuando yo era chiquita y pasé miles de navidades con ella.
Sin embargo, mi nombre no figuraba en la invitación a su casamiento.
Pusieron el nombre completo de mi marido (cuya única relación con mi prima es que está casado conmigo).
A ver. No soy pretenciosa. Me hubiera bastado con mi nombre de pila escrito en el sobre. Pero no, nada.
Ni siquiera se dignaron a ponerme “Señora”. Simplemente “Sra.”
Cuando las mujeres nos casamos, toda la correspondencia dirigida a la pareja va con el nombre del tipo. Y nosotras nos tenemos que conformar con esas tres letras, esas tres miserables letras, para sentirnos aludidas.
Sin palabras.
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Tendrían que haber puesto: "'tu nombre completo' y Sr." Así evitan molestarlo al señor con correspondencia cuasi-ajena!
ResponderEliminarceci,sabes que tenes toda la razon!!
ResponderEliminarse me juzga mucho porque no uso el apellido de mi marido en la vida real.
Mi explicaion fue simple,NO TENGO GANAS,ME HIZE UN NOMBRE Y FAMA EN MI CARRERA ESTANDO SOLTERA,
¿debia cambiarmelo por ser señora de???'
jajaja
Ni mi suegra lleva el de mi suegro,revindico su apellido!
Son esas horrendas costumbre ,que remiten a que una mujer ES(entiendase ,esta completa) cuando se casa!
Lo gracioso del caso es que al aludido de mi amrido ni el va ni le viene,para el esta ok lo que yo decida.......
y eso vale!